Edificio histórico con decoración única, experiencia local en un entorno tranquilo, alojamiento que acepta mascotas.

Faltan opciones de comida rápidas por la noche!!! Las escaleras tienen poca luz, lo que genera una preocupación por la seguridad. La falta de un elevador es un inconveniente real, especialmente si viajas con maletas pesadas.

1. Habitaciones amplias y decoradas
2. Desayuno rico y variado

1. Falta de cortinas oscuras
2. Luz de mañana molesta

Un rincón de paz y encanto

El hotel es precioso, con un ambiente acogedor y una decoración única que evoca un toque rústico. Marcos, el anfitrión, fue excepcionalmente amable, brindando recomendaciones locales que enriquecieron nuestra estancia.

La única mejora que sugeriría es la instalación de cortinas oscuras en las habitaciones, ya que la luz de la calle puede ser molesta por las mañanas. Más privacidad sería ideal.

Los pudines del desayuno son un espectáculo! La combinación de tostadas de tomate hechas al momento y el zumo natural es pura delicia. Además, la decoración del hotel es un encanto, y la atención de Marcos te hace sentir como en casa.

La única queja podría ser que la habitación no tenía suficiente luz, pero eso no restó ningún brillo a nuestra experiencia.

Fue un lugar excelente para una breve escala en Villanasur-Río de Oca con una buenísima relación calidad precio. La habitación estaba limpia y el personal fue muy amable, ayudándonos con recomendaciones locales. Lleva tus propias cortinas si te molesta la luz temprano.

El hotel boutique valle de oca es un refugio encantador. habitaciones grandes y decoradas con gusto, además de un servicio excepcional por parte de marcos, quien siempre está dispuesto a ayudar. la cena fue deliciosa y el ambiente acogedor. 🌿✨

el desayuno podría ser más variado.

A nuestra llegada, nos recibió un ambiente acogedor y tranquilo que nos hizo sentir como en casa. La habitación era amplia y estaba decorada con mucho encanto, lo que le dio un toque especial a nuestra estancia. Es maravilloso poder disfrutar de un delicioso desayuno preparado por el dueño, que además es muy amable y se preocupa por cada detalle. Un gran plus fue que pudimos llevar a nuestros dos perros pequeños a desayunar y cenar con nosotros en el área del comedor. Además, el hotel está situado en un pueblo pintoresco, un lugar ideal para relajarse y desconectar, con bonitos senderos para pasear y la tranquilidad que se anhela en familia. apreciamos la atención personalizada y el servicio de recogida para realizar pequeñas excursiones, que fue de gran ayuda.

Aunque el lugar es maravilloso, notamos que las ventanas no cuentan con cortinas opacas, lo que dejó que muchísima luz entrara temprano en la mañana, dificultando un poco el descanso.

El jardín es tan hermoso que inmediatamente me sentí como un personaje de un cuento de hadas. La habitación tenía calefacción perfecta para esas noches frescas y un escritorio ideal para planear mis aventuras por las aldeas medievales cercanas. Además, la conexión Wi-Fi fue más rápida que mi entusiasmo por explorar la zona.

Información limitada

La conexión Wi-Fi es débil, pero la atención de Marcos fue excepcional. Habitaciones lindas aunque pequeñas.

Increíble el desayuno con tostadas de tomate hechas al momento! 🥪 La habitación era acogedora, aunque un poco pequeña para abrir la maleta. Vale la pena, pero un mejor espacio ayudaría.

La habitación era cómoda, pero muy sucia y mal mantenida.

Un lugar encantador para desconectar

Estar en este hotel fue una experiencia muy agradable. La habitación, decorada de manera única, fue cómoda y amplia, con una cama que me permitió descansar a gusto. El desayuno, aunque limitado, incluía unos dulces espectaculares y la atención del personal fue excepcional, especialmente de Cristina, quien nos recomendó sitios maravillosos para visitar.

La habitación era acogedora y estaba decorada con un estilo étnico que le daba un toque especial. El desayuno fue espectacular, con un buen servicio incluso tardando un poco en bajar. Sin embargo, las ventanas no cuentan con cortinas opacas, lo que permite que la luz entre temprano en la mañana, dificultando un poco el descanso. Al ser un lugar tan tranquilo, se echa de menos un poco más de privacidad en las zonas comunes.

El hotel ofrece habitaciones amplias y cómodas, decoradas de forma única, lo que le brinda un toque especial. El personal, en particular Cristina, es muy amable y brinda excelentes recomendaciones locales. Sin embargo, el desayuno podría ser más variado y las ventanas no mantienen la oscuridad necesaria por la mañana, lo que puede ser un inconveniente.